Enfermedades lisosomales servirán para prevenir y tratar Parkinson y Alzheimer

Especialistas españoles desplazados al World Symposium Rareview de San Diego (Estados Unidos) han estimado que un mejor abordaje de las podrá ayudar a un mejor tratamiento y prevención de enfermedades como la de o Alzhéimer.

Este planteamiento fue expuesto por ellos en el Post Ws Rareview organizado por la compañía biotecnológica Sanofi Genzyme, pionera en esta área, con objeto de exponer las conclusiones del simposio internacional a 100 especialistas del país. Dicha multinacional ya ofrece terapias para enfermedades ultrarraras como (oral), en enfermedad de Gaucher, o Myozyme (TES), en . Así como desarrolla la versión oral de fabrazyme, actualmente inyectable, para , y aldurazyme, para enfermedad de de tipo 1.

De igual forma, Sanofi Genzyme realiza un ensayo de fase II de un posible fármaco para la enfermedad de Niemann-Pick, para la que no hay tratamiento en la actualidad, así como otra molécula oral para la enfermedad de Fabry. En el caso de Myozyme, se trata de una Terapia Enzimática Sustitutoria (TES).

Jesús Villarrubia

Ante el fallo de enzimas

El especialista del servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid, el doctor Jesús Villarrubia, explicó que cada enfermedad lisosomal afecta a una enzima concreta del metabolismo celular, con perjuicios distintos para la salud de la persona, en dependecia del punto exacto del metabolismo en que ocurra. De forma que las terapias buscan reparar cada punto concreto del metabolismo celular que impide la eliminación de los residuos celulares patogénicos, dando lugar a enfermedades como la de Gaucher, Fabry, Pompe o Mucopolisacaridosis, y sus variantes.

Seguidamente, Villarrubia analizó las novedades aportadas en San Diego sobre la enfermedad de Gaucher, dejando a sus colegas neurólogos los aspectos de la enfermedad que afectan al sistema nervioso central.

Como novedad, destacó la presentación del primer tratamiento oral en primera línea, como una revolución que, tras ocho años de desarrollo, evitará a los pacientes la incómoda terapia enzimática sustitutoria, intravenosa, cada 15 días.

Al ser el primero en hablar, Villarrubia fue el primero también en mencionar las conexiones publicadas en la reunión americana sobre las enfermedades lisosomales y las neurodegenerativas. Algo que se empieza a saber tras analizar las mutaciones que aparecen en las enfermedades de Gaucher y Niemann-Pick, con la posibilidad de elaborar protocolos de valoración de riesgo de desarrollar la enfermedad.

En enfermedades ultrarraras como la citada de Niemann-Pick tipo, explicó que raramente se da en la población española, al revés que en las comunidades judías ortodoxas de Nueva York e Israel, donde se concentran la mayoría de casos del mundo, favorecidos por la endogamia social.

Salvo las últimas en las que se está investigando, las enzimas no se pueden tomar por boca y precisan terapia de sustitución enzimática inyectable cada 15 días, con esperanza de reducción de sustrato por vía oral. Según Villarrubia, existen 70 enfermedades lisosomales, de las que sólo una decena tienen tratamiento. Sin que por otro lado esté claro la forma de hacer un cribado técnicamente efectivo y socialmente aceptado.

Alberto Ortiz

Depósitos lisosomales patológicos

El responsable del Servicio de Nefrología de la Fundación Jiménez Díaz de Madrid, el doctor Alberto Ortiz, compartió con los periodistas que el congreso mostró similitudes entre las distintas enfermedades de depósito lisosomal, por bloqueo de la autofagia, con diferencia entre las variantes infantiles y las asociadas a la edad, como Parkinson o Alzheimer. Para Ortíz, este mal funcionamiento de los lisosomas de las células impide que estas se limpien internamente, lo que provoca su envejecimiento prematuro y muerte.

En el caso de la enfermedad de Fabry, explicó que cursa con fuertes dolores abdominales en los niños, mientras que en adultos debuta a los 30 años, con afectación de corazón o Sistema Nervioso Central (SNC), de forma que procede un lo más precoz posible para evitar el fallecimiento. Para ello se realiza el reemplazo enzimático, en función de las mutaciones específicas, con la existencia también de terapia génica por infección con un vector.

Según Ortiz, actuar con inhibidores en ciertas alturas del proceso metabólico celular, permite corregir los tramos donde falta la enzima que genera cada una de estas enfermedades ultrarraras.

Dado que las enfermedades lisosomales tienen bases y consecuencias específicas, el nefrólogo de la Fundación Jiménez Díaz consideró necesario encontrar un regulador maestro del lisosoma para corregir todas estas enfermedades caracterizadas por una autofagia deficiente. Con visos a reducir, añadió, el envejecimiento celular.

Antonio González-Meneses

Caballos de Troya

Por su parte, el responsable de la unidad de Dismorfología y Metabolismo del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, el doctor Antonio González-Meneses, disertó sobre la enfermedad de mucopolisacaridosis. Una patología que también se manifiesta en la infancia, con varios tipos posibles, y que por acumulación puede desembocar en la muerte de los niños entre los 8-12 años de edad.

Como explicó González-Meneses hay algunos tratamientos para las formas cerebrales de la mucopolisacaridosis, que puede verse como una antesala del Alzheimer. Pero cuando no es posible que la terapia al cerebro, la neurodegeneración precoz en los niños es inevitable. Por eso celebró que en San Diego se mostrara el camino para sortear la barrera hematoencefálica, mediante una inyección directa al cerebro o con un caballo de Troya que atraviesa esa barrera.

También analizó González-Meneses el uso de vectores virales que corrijan la deficiencia en la célula y otros vectores que eliminen las mutaciones patológica. Al ser las enfermedades lisosomales como una suerte de síndrome de dióegenes celular, en la que esta es incapaz de eliminar sus residuos, el pediatra sevillano abogó por encontrar una plataforma básica que permita abordar todas estas patologías.
En cuanto a la enfermedad de Fabry, el especialista aconsejó adelantarse a la insuficiencia renal crónica. A lo que añadió que el futuro del abordaje de estas patologías está en el cribado neonatal y preconcepcional.

Pilar Giraldo

Primer registro

La especialista de la unidad de Investigación Traslacional del Hospital Universitario Miguel Servet de Zaragoza, la doctora Pilar Giraldo, explicó que el registro de la enfermedad de Gaucher, patología lisosomal sobre la que existe mayor conocimiento, ya ha detallado 401 casos desde 1996., con datos de familias con anotaciones de individuos portadores y no portadores, biobanco de células, plasma, y registro de RNA y ADN.

Según recordó, Gaucher fue la primera de las enfermedades lisosomales en tener tratamiento enzimático sustitutivo, sin que este haya llegado todavía a otras muchas patologías. En cuanto a la enfermedad de Niemann-Pick tipo C, describió que se debe al paso del colesterol por las células, con indicio de daño neurológico en aquellos pacientes que muestran ataxias.

Sobre la reunión de San Diego, Giraldo aseguró que es el congreso más importante del mundo en su género y que cada año aporta datos muy fiables. En cuanto a los ensayos para enfermedades raras y ultrarraras, recordó que su principal dificultad es el reclutamiento de pacientes con características homogéneas.

También citó la especialista los avances en chaperonas, moléculas terapéuticas que reconforman los pliegues mal hechos de algunas proteínas. Aunque estas posibles terapias, junta al resto de las comentadas en la reunión, aún son sintomáticas y no curativas. En relación con el cribado, Giraldo adujo que introduce el problema ético del derecho a la información o a su rechazo, por tratarse de enfermedades contra las que, en bastantes casos, no se puede hacer nada.

Jordi Díaz

Acumulaciones de glucógeno

El neurólogo del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, el doctor Jordi Díaz, consideró que, después de lo visto en San Diego, podría pensarse que el DNI genético está cada vez más cerca.

Sobre la enfermedad de Pombe, detalló que es la acumulación de glucógeno en los lisosomas del corazón, el hígado y las neuronas. Tiene dos formas. La infantil, muy progresiva, con hipotonia y retraso de crecimiento y muerte antes del año.

Estas formas pediátricas disponen de cribado neonatal en Taiwan y ahora también en Estados Unidos, mientras que en adultos, la enfermedad de Pompe aparece a los 30 años, con disfuncionalidad respiratoria y motórica.

En función de los buenos resultados observados en modelos animales, Díaz estimó que el futuro del control de la enfermedad de Pompe pasará por la terapia génica. Finalmente, coincidió con sus compañeros ponentes en que la afectación neurológica de estas enfermedades raras iluminará el camino en la neurodegeneración, y en que será posible llevar la terapias al interior de la célula metabólicamente enferma.

 

Artículos relacionados: enfermedad de gaucher, enfermedad de fabry, enfermedad de pompe


Fuente: https://goo.gl/Tsk2Tb